“SOMOS LO QUE HACEMOS DÍA A DÍA. DE MODO QUE LA EXCELENCIA NO ES UN ACTO, SINO UN HÁBITO”. Así traducía el filósofo Aristóteles en el siglo III su visión del significado de la vida. Vida que queremos ver plasmada en cada uno de nosotros los trabajadores de salud del Hospital Iquitos, donde cada día construimos a través de nuestros actos una institución sólida, con principios y valores en busca de una atención y servicio con calidad y calidez hacia nuestros pacientes.

El esfuerzo y la dedicación con el que venimos todos los días a laborar se ve compensado con la alegría y la satisfacción de los pacientes que eligieron venir hacia nosotros para encontrar el remedio a sus males. El trabajo desinteresado y en equipo demuestra en todo momento que la única forma de conseguir los logros institucionales es en base a la unión y participación de todos sus miembros.

La comunicación es por ello clave del éxito personal y profesional. Si tenemos la búsqueda de la excelencia en función de lo que hacemos cada día, donde buscamos siempre obtener logros en base a un trabajo en equipo, la comunicación es la resultante de la necesidad de demostrar que lo que se hace día a día nos motiva para seguir esforzándonos en ser cada vez mejores donde quiera que estemos ocupando un puesto de trabajo en nuestra institución.

El nacimiento de este Boletín obedece a este imperativo. Hay un gran respeto por el trabajo que a diario hacemos, y el respeto es el principio de la comunicación. Hay una oración y un acto de bondad en cada esfuerzo y tiempo que hemos dedicado a nuestros pacientes. Hay una oración en el día trabajado sin interés mezquino y tan sólo guiados por la bondad y el amor hacia nuestro prójimo. Y eso queremos comunicar.

Bienvenidos amigos a esta gran aventura, juntos construyamos en el día a día esta grande obra de amor, vivamos con optimismo y esperanza sabiendo que el esfuerzo depositado cada día nos es en vano, no se traduce en riquezas materiales sino en hábitos de vida que buscan satisfacer a todos nuestros usuarios. Y mañana más tarde diremos: “Gracias Hospital Iquitos, gracias César Garayar, mi vida no ha sido vana. Te la he dedicado con todo corazón y sacrificio. Gracias Dios.

Dr. Carlos Alberto Coral Gonzales
Director Ejecutivo del Hospital Iquitos